¿Problemas para dormir? vigila tus rutinas

Todos hemos pasado alguna de esas noches en las que cuesta conciliar el sueño, das vueltas a la almohada como si ella tuviera la culpa, te levantas, paseas, ves la televisión, comes algo y vuelves a la cama para intentarlo de nuevo…

Si esto ocurre una noche aislada no nos preocupa, un poco de sueño al día siguiente pero que pronto se recuperará. Sin embargo, si ya son varios días con falta de sueño hay que revisar nuestras rutinas antes de acostarnos, porque tal vez la solución es más sencilla de lo que imaginamos.

Te presentamos algunos consejos que hemos recopilado con rutinas para tener en cuenta y que probablemente te ayudarán a dormir mejor:

1. Cenar dos horas antes de acostarse

«Desayunar como un rey, comer como un burgués y cenar como un mendigo». Toda cena que se precie debe ser ligera, fácil de digerir y debe realizarse al menos dos horas antes de acostarse, para que el organismo complete la digestión y se facilite el descanso nocturno. El menú ideal estaría compuesto de sedantes naturales, como espárragos blancos con queso y pavo cocido, acompañados de un vaso de leche tibia con miel y unas galletas. Estos alimentos tienen un inductor natural del sueño, que se llama L-triptófano.

2. Tener rutinas para el descanso

Intenta acostarte y levantarte siempre a la misma hora, incluso los fines de semana. Verás cómo, en poco tiempo, consigues despertarte sin necesidad de que suene la alarma del móvil, con tu propio reloj interno; y eso, después de haber dormido menos horas pero haberlas aprovechado mucho más.

3. Acostarse antes de las 23h
El mejor sueño (en cuanto a calidad) se tiene entre las once de la noche y las dos de la madrugada, es decir, en el primer ciclo. Si puedes, te vendría bien reestructurar tu vida y acostarte un poco más temprano para aprovechar al máximo esa franja del sueño.

Seguiremos recopilando más consejos para ayudarte a tener un buen descanso!!